Con atención en las primeras reuniones pude comprobar con que soltura cada quien participó.

Se transitaron diferentes emociones la risa, el afecto, y si bien el trabajo es grupal, tiene un interés personal no grupal.

 

Cuando se entra a un grupo es para obtener mejoras uno. El grupo es un medio. Pero el grupo consigue que cada cual realice sus objetivos. El matiz que da la experiencia “entre todos” es vital.

 

También es valido tener en cuenta que la respuesta del otro no hubiese sido nunca la mía, y entonces me encuentro diciendo:¿cómo no lo había pensado así? O ¡qué idea! O ¡qué tontería! O ¡qué bueno! O ¡qué ocurrencia! Las reuniones son LÚDICAS porque es el juego la forma para desarrollarlo y es UNITARIO pues comienza y finaliza en cada jornada.

 

Si te AGRADA la idea de salir de la rutina y regresar a tu casa con un sabor en la boca distinto y con una experiencia de renovación tenés un lugar que te esta esperando. Habrá dirección y contención terapéutica.

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